jueves, 8 de noviembre de 2007

Este 15 de Noviembre se va a estrenar la película documental de Luis Mandoki "Fraude, México 2006".


Este 15 de Noviembre se va a estrenar en los cines de todo el país la película documental de Luis Mandoki "Fraude, México 2006". Con respecto a ese tema, es que les hago llegar un fragmento de la columna "astillero" que se publica en el diario La Jornada. En este texto, Julio Hernández López denuncia las trabas que la empresa de cines "Cinépolis" le ha querido poner a la exhibición de esta cinta.
Antes de que lo lean, yo quiero decirles que independientemente de la postura que tenga cada quien con respecto a las elecciones del año pasado o de la política en general, me parece que hay que defender el derecho que todos tenemos a estar informados, sobretodo cuando se trata de documentales como éste, que cuestionan seriamente a los poderes fácticos que dominan nuestro país.... Ahí se los dejo:

Astillero. Julio Hernández López. (La Jornada, 29/10/07)
Astillas.
En Cinépolis están haciendo tretas para que no tengan la adecuada exhibición los avances de la película dirigida por Luis Mandoki, Fraude, México 2006. Ciudadanos que han visitado salas cinematográficas de todo el país reportan que en muchos lugares no se han expuesto los avances del mencionado documental o que los están incluyendo sólo en la programación de las pocas películas mexicanas en cartelera (algunas particularmente malas) y en unas cuantas extranjeras, pero no en el grueso de éstas que son la mayoría del menú disponible (el criterio “nacionalista” es falso: por ejemplo, los avances de Voces inocentes, otra cinta dirigida por Mandoki, fueron mostrados en el paquete de “cortos” previo a cintas mexicanas y de otros países). Los “inspectores” cívicos han encontrado un amplio mosaico de explicaciones de los gerentes de salas de Cinépolis donde no se exhiben o se exhiben mal los adelantos de Fraude, México 2006: que no les han llegado las copias, que la política de la empresa es poner trailers mexicanos sólo con cintas mexicanas, que no hay por qué informar a nadie de las decisiones “internas” de Cinépolis, que no desean suscitar inconformidades políticas en ciudades conservadoras, e incluso, de plano, que “hay instrucciones de exhibir nada, o lo menos posible, de la película del fraude”. No puede hablarse en estricto sentido de censura, sino de una estrategia tramposa de desgaste y ocultamiento (los carteles también están colocados en desventaja o de plano no hay) que trata de generar la menor asistencia posible a la temporada de exhibición de la película que comenzará a exhibirse el próximo 15 de noviembre. Si triunfaran esos planes, Fraude, México 2006 sería retirada pronto de la pantalla. Por ello el documental se ha convertido en un material de activismo ciudadano. Defender hoy la exhibición plena y justa de los avances de la película es una forma de defender el derecho a la información sobre lo que sucedió electoralmente el año pasado. Recuérdese que Cinépolis (Censurópolis) no quería difundir la cinta porque su principal accionista, Alejandro Ramírez, dice ser muy amigo de Felipe Calderón y no desea molestarlo con películas que no le favorecen. También hay que tener presente que Televisa hizo cuanto pudo, presionando a Warner Bros de México para que el documental no tuviera exhibición masiva…el que nada debe, nada teme

1 comentario:

Anónimo dijo...

Muy mi querido Chango, siempre con tus temas polémico, que al final del día tocan fibra, poniéndome en tu postura de cineasta y dejando de lado la política, es frustrante que limiten el arte y decidan que hacer con el, sobre todo cuando el México se lucha contra corriente para este “Arte” subsista, entre malas promociones, pocas oportunidades, ascos de películas y una que otra que realmente vale la pena verla, pero que no tiene ni la fuerza ni el apoyo suficiente, estoy en contra de limitar el arte, pero también en contra de aquellos que lo prostituían para mancillarlo más de lo que esta, Mi querido Chango. Aunque deberá haber otros medios menos limitativos, no se nos olvide que cada empresa es libre de trasmitir lo que crea mejor para su cartelera, bolsillo y negocio, si somos partidarios de una idea u otra, en la libre empresa se es libre de manejarse como uno le plazca o a ti o mandoki le gustaría que les dijeran como dirigir o escribir creo que no. Pero en fin, no soy partidario de López Obrador en realidad es un cáncer, pero requerimos ese tipos de cáncer para que el pueblo crezca, sea cierto o no lo que dice en la película, lo cual no se, puesto que no le he visto, es necesario para este gobierno se empeñe más y mejor en hacer las cosas, sino regresaríamos a lo que antes fuimos. Y si mi chango espero que puedan publicarla, ya que es obvio que hay algo atrás de esa historio.